Deep Impact
El astrónomo amateur Leo Biederman (Elijah Wood) alerta al Dr. Marcus Wolf (Charles Martin Smith) de un cometa inusual. Wolf se da cuenta de que el cometa chocará con la Tierra, pero muere en un accidente antes de poder alertar a sus colegas.
Doce meses más tarde, la periodista de MSNBC Jenny Lerner (Téa Leoni) investiga la renuncia del secretario del Tesoro de Estados Unidos, y su conexión con una tal Ellie. Más tarde se entera de que Ellie no es una amante, sino ELE (acrónimo de extinction-level event: evento al nivel de extinción).
Debido a la investigación de Jenny, el presidente de Estados Unidos, Tom Beck (Morgan Freeman) tiene que anunciar públicamente los hechos ocultos: el cometa —nombrado Wolf-Biederman por sus dos descubridores— tiene 11 km de diámetro, lo suficientemente grande como para acabar con la civilización humana al chocar con la Tierra.
Estados Unidos y Rusia planean enviar la nave Messiah para destruir el cometa, utilizando cargas nucleares. Un suspiro de alivio cambia la vida en todo el mundo, y tanto Leo como Lerner se convierten en celebridades.
La tripulación del Messiah, a cargo del capitán Spurgeon Fish Tanner (Robert Duvall), logra colocar las cargas en la superficie del cometa, pero uno de los tripulantes muere y otro queda gravemente herido.
Cuando las cargas detonan, el Messiah queda dañado y pierde contacto con la Tierra. El cometa no se destruye, sino que se parte en dos pedazos: uno pequeño, de unos 2 km de longitud, y el otro de unos 9 km de longitud, que todavía es una amenaza para el mundo.
El presidente Beck, al enterarse del fracaso del Messiah, declara la ley marcial, y anuncia que varios gobiernos del mundo están construyendo refugios subterráneos para tratar de sobrevivir al impacto. El refugio nacional de Estados Unidos se encuentra en las cavernas calizas de Misuri.
El gobierno estadounidense lleva a cabo una lotería para seleccionar a 800.000 estadounidenses que se salvarán junto con 200.000 científicos, ingenieros, maestros, artistas, soldados y oficiales preseleccionados (junto con sus familiares más cercanos).
Lerner, Leo y sus familias están preseleccionados, pero la novia de Leo, Sarah Hotchner (Leelee Sobieski) no lo está. Leo se casa con Sarah para salvar a la familia de ella, pero los Hotchners quedan fuera de la lista de evacuados por un error y Sarah decide a último momento quedarse con su familia. Leo y Sarah se despiden dolorosamente.
Los gobiernos de la Tierra hacen un último esfuerzo contra el cometa, disparando misiles nucleares llamados Titán, pero éstos fallan.
Leo, ya en la entrada del refugio, decide regresar con Sarah, y se separa de su familia. En su viaje la encuentra junto a su familia en la carretera; los padres de Sarah insisten que Leo se lleve a Sarah y a su hermana bebé a las tierras altas de los Montes Apalaches. Mientras tanto, Jenny renuncia a su sitio en el helicóptero de evacuación, a favor de una compañera de trabajo con su hija pequeña. En la espera, retoma contacto con su padre, Jason Lerner (Maximilian Schell) y su madre, Robin Lerner (Vanessa Redgrave), que estaban divorciados y distanciados de ella. Más tarde se entera de que su madre se suicida por padecer de una enfermedad incurable.
El fragmento pequeño del cometa cae en el Océano Atlántico cerca de Bermuda, creando un megatsunami de más de 540 metros de altura. Leo y Sarah sobreviven, pero Jenny, junto a su padre y millones de personas de Europa, África y la costa este de Estados Unidos, mueren.
El mundo se prepara para el impacto del fragmento más grande, que caerá en el oeste de Canadá y creará una nube de polvo que bloqueará la luz del sol durante dos años, lo que matará toda vida vegetal y animal de todo el planeta (excepto los que estén en los refugios diseminados por todo el mundo).
En un último sacrificio, el capitán Tanner y todos los tripulantes del Messiah deciden estrellar su nave contra el fragmento, con todas las cargas que les quedan. Luego de despedirse de sus seres queridos, impactan al fragmento y mueren, pero logran desintegrarlo, evitando así el fin de la Humanidad.
La última escena es la del presidente Beck pronunciando un discurso esperanzador, mientras a sus espaldas se ve el Capitolio siendo reconstruido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario