La novia de Chucky

La misma noche en que termino Chucky El Muñeco Diabólico 3, Tiffany (Jennifer Tilly,) la ex-novia y cómplice del asesino Charles Lee Ray, ha recuperado los restos despedazados de Chucky el muñeco asesino de las manos de la policía. Tras haber conseguido trozos de otros muñecos, como brazos y piernas, Tiffany toma una aguja y empieza a coser a Chucky. Una vez cosido y resucitado, Chucky, ya desfigurado con sus cicatrices y coseduras, mata a Demian (Alexis Arquette) un amigo de Tiffany (que pretendía acostarse con ella); luego Chucky y Tiffany hablan un rato sobre su pasado y se "reencuentran". Tiffany le explica que lo había resucitado para empezar una nueva vida junto a él; le explica que 10 años atrás (cuando se hizo la primera película de Chucky), la noche en que lo mataron (cuando él era todavía un humano), ella había encontrado un anillo de compromiso sobre la chimenea e, inocentemente, creyó que Chucky pensaba usarlo para pedirle matrimonio. Chucky le explica que ese anillo se lo había robado a Vivian Van Pelt, una de sus víctimas (que asesinó en 1978, antes de morir), únicamente para cambiarlo por dinero. Tifanny, al darse cuenta del error que cometió por haberse ilusionado con falsas esperanzas, somete a Chucky a la peor humillación de su vida, tratándolo como un bebé, no conformándose con, desde esa noche, dejarlo encerrado en el corral que pensaba utilizar para cuando tuvieran un hijo, sino que, además, en venganza, le entrega una muñeca de su mismo tamaño para que sea su novia y, completamente feliz, va después a ducharse. Chucky escapa de su corral, rompiendo algunos de los barrotes con el anillo de la muñeca (el mismo que Tiffany había conservado por tanto tiempo) y la asesina, electrocutándola arrojando a la bañera el televisor que estaba enfrente de la tina de baño. Mediante el rito vudú, transfiere su alma a la muñeca.

Chucky explica a Tiffany que la única forma de transferir sus almas a cuerpos humanos (Tiffany era primeriza en traspasar almas a cuerpos ajenos, por lo tanto, no sabía bien cómo hacerlo), y como Chucky ya había perdido la oportunidad de lograrlo con Andy Barclay (el niño de las tres primeras películas) y con Ronald Tyler (el niño negrito de la tercera película), la forma de lograrlo es mediante el Corazón de Dambala, un amuleto que llevaba en el cuello la noche de su muerte (esto se muestra al inicio de Chucky el muñeco diabolico 1) y que fue enterrado junto con él en Nueva Jersey. Tiffany convence por teléfono a su vecino Jesse (Nick Stabile) de que lleve a los muñecos al cementerio donde está enterrado el cadáver humano de Chucky. Durante la llamada telefónica, Chucky sacía sus ganas de asesinar contentándose con matar a un pez dorado en una pecera, sorbiendo el agua por una pajilla para vaciar la pecera para que el pez muriera ahogado por el aire. Después Tiffany se maquilla (para recuperar algo de su aspecto cuando era humana) y mientras Tiffany se maquilla se escucha la canción Call Me del grupo de rock estadounidense Blondie. De camino, Jesse convence a su novia Jade (Katherine Heigl) para que se fugue con él y juntos recorren el país hacia Nueva Jersey.

Durante el trayecto, se dan muertes misteriosas y una desaparición; la primera sucede en la camioneta de Jesse, cuando éste venia por Jade para que se fugaran, cuando un policía entra a la camioneta mientras Jesse y Jade se preparan para huir. Chucky y Tiffany preparan una trampa para matarlo: colocan unos clavos sobre la puerta de la guantera y cuando el policía se acerca, mientras Tiffany finge estar sentada en el asiento del acompañante, en tanto Chucky está acostado bajo el maletero, aunque evidentemente sujetando algo bajo el mismo; repentinamente Tiffany dice "¡Ahora!" y se agacha, Chucky entonces corta unos cables bajo la guantera, provocando que la tapa de la misma se abra con rapidez, disparando los clavos a la cara del policía, aunque eso no lo mata del todo (Chucky y Tiffany se ven obligados a ultimarlo mientras Jesse y Jade se casan en una capilla de otro pueblo, kilómetros después de dejar su hogar). La segunda se produce en una plaza central de la ciudad; esta vez Chucky y Tiffany matan a un policía, que trataba de indagar en su camioneta: Chucky se baja, con un pañuelo de Tiffany y se arrastra hacia el auto del policía, que no lo ve; abre el conducto de gasolina, mete dentro el pañuelo y le prende fuego, de manera que cuando este llegara al agujero, el auto explotara, provocando un alboroto en la plaza. El tercero es el de una pareja recién casada en un motel, a quienes Tiffany mata debido a que se habían casado para ser cómplices de robos. Los mata mientras tienen sexo; arroja una botella de champagne directo a un espejo suspendido sobre su cama, que se rompe en afilados pedazos, que los atraviesan a ambos sin piedad y revientan la cama (que era de agua). Luego Chucky se decide por fin a pedirle a Tiffany que se case con él (cosa que hace con el dedo cortado de la mujer recién asesinada que llevaba su anillo de bodas) y apenas termina el compromiso, tienen sexo en esa misma habitación. La policía desvía los ojos hacia la pareja, que estuvo presente en uno de los asesinatos y que amenazó a un policía. El amigo de la pareja (David) se reúne con ellos y descubre el cadáver del Jefe Kincaid (Tio de Jade) que asesinaron Chucky y Tiffany). Esto lo convence de que Jesse y Jade son los asesinos; toma la pistola del policía y les apunta, llamando a la policía, al volverse, encuentra a los muñecos apuntándoles con revólveres. David sale huyendo y es destrozado por un camión que recorre la autopista a toda velocidad.

Sigue el viaje, tras una breve persecusión de la policía. Durante el trayecto, escuchan las noticias, enterándose que la policía ha encontrado huellas digitales de Charles Lee Ray en las escenas del crimen, y que la policía forense se dirigirá hacia el cementerio en que yace para exhumar el cadáver humano de Chucky. Chucky y Tiffany, sabiendo que si llegaban al cementerio antes que ellos, el Corazón de Dámbala se perdería, se hacen con una casa rodante, matando a sus verdaderos dueños y, manteniendo amenazados a Jesse y Jade, los obligan a conducir hasta el cementerio, mientras ellos hacen su vida como si fueran una feliz pareja recién casada totalmente normal: Chucky está sentado junto a Jesse, apuntándole para que conduzca y Tiffany prepara la cena mientras maquilla a Jade (a quien tiene amarrada a una silla) para verse bonita cuando traspase su alma al cuerpo de ella. Jesse, en silencioso acuerdo con Jade, incita una discusión entre Chucky y Tiffany y, cuando esta está a medias, Jade patea a Tiffany dentro del horno de la cocina, en tanto que Jesse desvía la casa rodante para que se salga del camino, sacando del interior a Chucky. Luego que la casa explota y todos logran escapar, los varones toman como rehenes a las mujeres y se dirigen al cementerio. Cuando llegan, Chucky recobra el amuleto de su tumba, que ya había sido abierta por un agente para exhumar el cadáver, a quien mata y obliga a Jade a bajar por el. A punto de volver a ser humanos, Tiffany le apuñala. Él le responde iniciando una salvaje lucha, usando palas como si fueran espadas, para tratar de matarse a golpes. Chucky le da un golpe a Tiffany, que la deja al parecer inconsciente, pero se levanta y trata de estrangular a Chucky, que le responde a acuchillándola, matándola definitivamente. De un golpe con la pala, Jade lo arroja a la fosa de su tumba y le apunta. Uno de los forenses hace su aparición, al ver al muñeco moverse, deja que Jade lo mate acribillándolo cruelmente a balazos.

La pareja se va y el forense da con el cadáver de Tiffany. De súbito, esta empieza a convulsionarse y termina dando a luz. La cría (Glen) ataca al forense y la película finaliza.