La directora británica Antonia Bird ha fallecido el pasado día 24 después de una larga enfermedad. Tenía 54 años.
Bird comenzó en el teatro para luego pasarse a la televisión, medio en el que dirigió varios episodios de distintas series. Su debut en pantalla grande fue con la polémica ‘Priest’ (1994), la historia de un sacerdote que ve con su fe queda vulnerada cuando descubre casos de abusos de menores en una parroquia y la Iglesia quiere ocultarlos. La ganas de polemizar sobre tan espinoso tema ahoga las posibilidades del film, aunque no llega a los vergonzosos niveles de su siguiente trabajo, ‘Amor loco’(‘Mad Love’, 1995), una imposible historia de amor entre dos insoportables Chris O’Donnell y Drew Barrymore.
Con el actor Robert Carlyle funda la productora 4-Way Film, y teniendo a Carlyle, su actor fetiche, por protagonista filma primero ‘El rostro’ (‘The Face’, 1997), un thriller tan interesante como intrascendente, lo mismo que le ocurre a la película por la que Bird será recordada, ‘Ravenous’ (id, 1999), una historia sobre canibalismo y que en su momento obtuvo cierto prestigio.
Bird volvió a refugiarse en la televisión y en el 2014 tenía previsto volver al cine con una película titulada ‘Cross My Mind’.
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